martes, 23 de marzo de 2010

La Brújula y el Reloj

-Debo encontrar a ese caballero, debo encontrarlo! - Alicia seguía corriendo, desde el momento en que se bajó del árbol estaba decidida a buscarlo hasta el cansancio, todo el día y toda la noche de ser necesario...
-¿Que tan grande será el país de las maravillas?- se preguntaba constantemente. Pero pensaba que aunque fuera muy grande, su misión ahora era encontrarlo y no pararía hasta llegar al lugar donde se encontrara.
por fin atravesó un bosque que parecía interminable, y se dio cuenta que frente a sus ojos tenía a un jardín muy hermoso, pero lo curioso era, que en medio de ese jardín se encontraba una liebre acompañada de una persona con un sombrero de copa, y ambos estaban tomando el té en una larga mesa. Decidió acercarse a ellos para preguntarles si sabían sobre el caballero.
-Buenas tardes, disculpen...
Ellos al principio no le hacían caso, estaban ocupados discutiendo y cantando.
Entonces Alicia se acercó a una de las sillas que se encontraba vacía, y estaba apunto de sentarse, cuando de repente...
-No te sientes!!! No te sientes!!! está ocupado!! gritaron ambos, el del sombrero y la liebre
-Pero si no está ocupado!- dijo Alicia, y se sentó de todas formas
-Te gustaría tomar un poco de vino? - dijo la liebre
-gracias
-Pues ya no hay vino...
-Que grosero de tu parte ofrecer algo que ya no hay
-y que grosero de tu parte sentarte en una mesa donde no has sido invitada
-Lo siento... es solo que, vi que había muchos lugares, y ustedes solamente son 2...
-3! contando al lirón! - dijo el sombrerero
-Lirón? cual Lirón?
El Lirón estaba dormido en su silla, y era tan pequeño que Alicia no lo había notado.
-y también eres tú aún mas grosera, estamos teniendo una conversación y ni siquiera te has presentado todavía!
-Bueno, pero ustedes tampoco se han presentado! ... Mi nombre es Alicia
-Y yo soy el sombrerero
-Y yo la Liebre de Marzo
Liebre de Marzo... se quedó pensando Alicia, pero no preguntó nada
Una vez que se presentaron empezaron a tomar el té todos juntos, El Sombrerero empezó a contarle varias historias y adivinanzas a Alicia, hasta que llegó un momento en que las historias que contaba se empezaron a repetir. Y aunque Alicia le decía que esa historia ya se la había contado, el de todas formas la volvía a contar de nuevo.
Alicia se empezó a aburrir con tanta historia repetida, entonces decidió preguntarle sobre la persona a la que buscaba...
-Sombrerero, quisiera saber si tu conoces a un caballero? alguna vez has visto a uno?
-Un caballero?... claro!
-Enserio?- Alicia se alegró de escuchar eso
-todos en el país de las maravillas conocen al caballero blanco!- dijo la liebre
Caballero blanco?...será el mismo?... pensó Alicia
-Es muy fácil... solamente sigue las señales que hay por el camino! no seas tonta!- dijo la liebre
-Pero si yo no ví ninguna señal en todo mi camino hasta aquí! recorrí todo el bosque!
-Las señales están ahí! solo tienes que fijarte bien, tienes que interpretar las señales que te da el camino!- dijo el sombrerero
-Se va a perder! no conoce los caminos! no sabe interpretar nada todavía!- dijo la liebre
-Hey!, por supuesto que no sabe!... como va a saber! si es la primera vez que los recorre!... no es así? Alice?
Como sabe que no soy de aquí? si no le he dicho nada?... pensó Alicia.
-Claro que tengo razón!, por eso, lo que necesitas es... esto! -y el sombrerero le entregó un objeto redondo que parecía una cajita metalica.
-Qué es?- preguntó Alicia
-Anda, abrelo!- dijo el sombrerero
Alicia lo abrió, era una brujula
-Te ayudará a encontrar el camino
-Gracias-dijo Alicia- pero, como sé hacia que lugar que apunta la brújula debo ir.
-Haces demasiadas preguntas niñita, tú solo vé y siguela, te llevará a donde tengas que ir.
-Deacuerdo, muchas gracias - dijo Alicia, no muy convencida
Alicia se fué de ahí con la brujula que le dieron en sus manos.
Que par de locos!-pensó ella- No hacen mas que sentarse a tomar el té! y contarse las mismas historias una y otra vez! y no dicen mas que disparates!
Pero al menos me dieron esta brújula... que... no tengo idea de como usar.
que ademas, en lugar de decir Norte, Sur, Este y Oeste, tenía otros símbolos extraños que ella no conocía, pero aunque supiera lo que significaban, poco le servía porque tampoco sabía que dirección tomar. Y la brujula apuntaba hacia todos lados, daba vueltas como loca!
Alicia decidió seguir de todas formas hacia adelante, pero guardó la brújula. Pensó que tal vez le serviría mas adelante.
Caminó muchos pasos hasta que llegó a un lugar donde había una casita.
-Pero que hermosa casita! - dijo Alicia
-Pues gracias- le contestó una voz
Alicia se espantó, volteo y entonces vió que el que había hablado era el conejo blanco!
-Conejo Blanco! eres tú!
-Es tarde! tengo que irme! Adiós!
-Espera! no te vayas!- gritó Alicia y puso su mano en su hombro para detenerlo, pero en vez de detenerlo solo alcanzó a agarrar el enorme reloj de bolsillo que traía colgando el conejo y rompió la cadena
-Mira lo que has hecho!- gritó el conejo blanco -Mi reloj!!
-El reloj está bien, mira!, solamente se rompió la cadena ves?
Al observar más de cerca el reloj del conejo, Alicia notó que sus manecillas también daban vueltas como locas! constantemente, sin parar ni una sola vez!
-Creo que tu reloj no funciona, las manecillas no marcan ni una sola hora
-Claro que sirve mi reloj! marca perfectamente bien la hora niña!
-Como puedes saber que hora es? en un reloj que marca tan rápido las horas?
-Es cuestión de saber interpretarlo! es todo!
-Eh?...- Alicia se quedó pensando, recordó la brujula que tenía en su bolsillo derecho.
Sacó la brujula, y esta seguía dando vueltas como loca sin apuntar a ningún lado.
entonces se le ocurrió algo a Alicia, juntó ambos, el reloj de bolsillo y la brujula!
pero que tonterías estoy haciendo!- pensó Alicia y se rió, pero de todas formas se fijó si había pasado algo... nada
-Claro!, Debí imaginarme que no pasaría nada!... ahora debo buscar otra manera de llegar a donde el caballero blanco...
Pero de pronto, cuando mencionó al caballero blanco, el reloj se paró, y la brújula también.
Alicia los miró asombrada, ambos se habían alineado a una sola hora y hacía una sola dirección!